¿Sabías que, si eres un no residente con bienes en los Estados Unidos y aún no has establecido tus documentos de planificación patrimonial, es probable que tu familia tenga que navegar a través de un proceso de sucesión? Sin embargo, eso no es todo; también podrían enfrentarse a impuestos sobre el patrimonio. Ya sea que poseas propiedades, un negocio o una cuenta bancaria, es esencial entender las implicaciones para estos activos en caso de tu fallecimiento.
Implicaciones de Impuestos sobre el Patrimonio
Individuos no residentes que no son ciudadanos estadounidenses pueden encontrarse sujetos al impuesto sobre el patrimonio de los Estados Unidos sobre sus activos ubicados en Estados Unidos, técnicamente llamados activos situados en Estados Unidos. Estos activos pueden incluir bienes raíces, ciertos tipos de bienes personales y acciones en empresas estadounidenses. Sin embargo, es importante tener en cuenta que algunos activos, como ciertas cuentas bancarias y los beneficios de seguros de vida, están exentos de este impuesto.
El valor de los activos ubicados en Estados Unidos es crucial para determinar la responsabilidad tributaria. Los albaceas deben evaluar el valor total de los activos dentro y fuera de Estados Unidos, conocido como el “patrimonio bruto en Estados Unidos” y el “patrimonio bruto fuera de Estados Unidos”. Estas valoraciones se basan en el valor de mercado justo de los activos en el momento del fallecimiento del individuo.
Requisitos de Cálculo y Presentación
Para calcular el impuesto sobre el patrimonio, se pueden restar deducciones como gastos funerarios y deudas pendientes del patrimonio bruto para llegar al “patrimonio imponible”. Además, cualquier donación tributable realizada por el fallecido durante su vida puede necesitar ser considerada en este cálculo.
Si el valor total de los activos ubicados en Estados Unidos, combinado con las donaciones tributables, supera los $60,000, el albacea está obligado a presentar el Formulario 706-NA ante el Servicio de Impuestos Internos (“IRS”) dentro de los nueve meses posteriores al fallecimiento del individuo, a menos que se conceda una prórroga. Los albaceas también deben estar al tanto de cualquier tratado sobre impuestos sobre el patrimonio entre Estados Unidos y el país de origen del individuo, ya que estos tratados pueden afectar la cantidad de impuestos adeudados.
Proceso de Sucesión
En los casos en que un individuo no residente fallece con activos en Estados Unidos y sin designación de beneficiarios, el patrimonio generalmente pasa por el proceso de sucesión. La sucesión es el proceso legal por el que un tribunal valida el testamento de un fallecido, si existe, y supervisa la distribución de los activos según la ley estatal.
Durante la sucesión, el tribunal designará a un albacea o representante personal para administrar los asuntos del patrimonio. Esta persona es responsable de identificar e inventariar los activos del difunto, pagar cualquier deuda o impuesto pendiente y distribuir los activos restantes a los herederos o beneficiarios legítimos.
Entendiendo las Consecuencias
Los beneficiarios de los activos del patrimonio de un individuo no residente deben entender su responsabilidad potencial por impuestos sobre el patrimonio impagos. El IRS tiene disposiciones para la responsabilidad del receptor, lo que les permite cobrar cualquier impuesto sobre el patrimonio impago a aquellos que reciban distribuciones del patrimonio. Asegura la seguridad financiera de tu familia abordando estos asuntos de manera proactiva. Si necesitas ayuda para entender las complejidades del panorama tributario o establecer tus documentos de planificación patrimonial, contáctanos hoy mismo.